El Ejército de Estados Unidos realizó una prueba de vuelo de un tipo de misil que estuvo prohibido por más de 30 años por un tratado que tanto Estados Unidos como Rusia abandonaron este mes, informó el Pentágono.
De acuerdo con analistas, la prueba de este domingo en la costa de California marca la reanudación de una competencia armamentista que podría aumentar las tensiones entre Estados Unidos y Rusia.
El Gobierno de Trump ha dicho que sigue interesado en el control de armas, pero cuestiona la voluntad de Moscú de adherirse a los compromisos de su tratado.
El Pentágono dijo que probó una versión modificada de un misil de crucero Navy Tomahawk, que fue lanzado al suelo desde la isla de San Nicolás y golpeó con precisión su objetivo después de volar más de 500 kilómetros.
El misil estaba armado con una ojiva convencional, no nuclear.