Los hermanos Isabel y Pedro C., fueron secuestrados el día de ayer por grupos delictivos que los interceptaron a la altura del campo deportivo de la comunidad de Tecamalucan, cuando se dirigían a su respectivo trabajo.
Ella, de profesión médico ginecóloga en un hospital de la región, y él, maestro de la secundaria Manuel Altamirano, de cabecera municipal, fueron bajados de sus vehículo.
Los secuestradores y se los llevaron en otro automotor, y hasta el momento se desconoce más de ellos, aunque al parecer ya hicieron contacto con la familia.
Esta última está pidiendo porque los plagiarios respeten la vida de sus víctimas, y pueda negociar el pago de un rescate, a fin de que regresen salvos y sanos.
Lo cierto texto es que ante la inseguridad que hay en la zona este es el tercer secuestro que se registra en una mañana, quedando claramente superada la supuesta vigilancia por parte de las corporaciones policíacas federales, estatales, o municipales.
Sea como sea ninguna autoridad se ha mostrado eficiente o con la capacidad suficiente para investigar cada uno de estos hechos, pero sobre todo de esclarecerlos y castigar a los responsables, pese a los archivos con los que cuenta cada una de las corporaciones y en los cuales podrían recordar quiénes y qué tipo de bandas delictivas operan en la zona centro.
